enero 2011

Reclutamiento

Hay cosas con las que no se debe jugar, una de ellas la comida como decía mi madre. Sin embargo, juguetear con el fuego, en sentido figurado, a veces puede resultar tremendamente seductor y eso es lo que ha provocado un contratiempo en mi vida.

Resulta que mi hermana mayor se ha quedado sin niñera para Champi y está intentando hacerse con alguna que cumpla con los requisitos. Durante ese proceso le ha pedido a mi hermana pequeña que vaya a cubrir la plaza hasta que encuentre a alguien. Esto puede durar, entre pitos y flautas y más pitos, un mes.

Si os preguntáis qué narices pinto yo ahí para que ande hablando de jugar con fuego, aquí os dejo una evidencia de mi hacer:



Esa es una de tantas fotos que le mandábamos a mi hermana mayor poniéndole los dientes largos. Su respuesta fue clara: reclutar a mi hermana pequeña (la artífice de la mayor parte de las delicias que salen de la cocina) tanto tiempo como pueda y alentarla a usar la Thermomix que posee. Es algo así como secuestrar a los científicos del lado contrario y ofrecerles tecnología novedosa para sus proyectos en tiempos de guerra.

Menos mal que mi madre puede suplir esta carencia estratégica formidablemente:



Así que, no os preocupéis de mi alimentación, podré sobrevivir un mes. Eso sí, no voy a tener con quién meterme cuando llegue a casa.

Sinde rechos

Los partidos políticos querían sacar su propia tajada para la aprobación de la Ley de Economía Sostenible y por ello fue rechazada ante el congreso; no fue porque no estuvieran de acuerdo sino que chantajearon al gobierno de turno pidiendo sus rectificaciones que le beneficiaban a ellos, que no a los ciudadanos.

También se destapó lo que llamaron Sindegate, unas filtraciones de WikiLeaks que demuestran la participación de EEUU en la formación de la polémica ley.

Pero daba igual, era cuestión de tiempo que aprobasen la ley Sinde, a pesar de los esfuerzos de mucha gente de frenarla y retirarla para proponer alternativas más lógicas.

Un resumen de los efectos de dicha ley, que no todo es por el tema de las descargas, sino más bien por la capacidad de censurar páginas web (aunque algunos desde sus mansiones en Miami no sepan entenderlo), lo podemos escuchar en la entrevista a David Bravo por parte de RTVE.

Todo esto se resumen en que da igual que digamos que esto es una democracia, porque la gente con influencia y dinero es capaz de pasar por encima de los derechos de millones de personas, a pesar de que en otros sitios las cosas funcionan de diferente forma.

Aquí nos suben la edad de jubilación y los impuestos, nos reducen los beneficios sociales, facilitan el despido, fomentan la economía sumergida y subvencionan a los bancos con dinero público por su mala/nula gestión. A esto último detallar que, si bien al final supuestamente los bancos nos devolverán el dinero, el interés que les cobraremos será ridículo comparado al que tendremos que pagar para devolver el rescate que igual nos hacen comer desde la UE.

La panda de **brones que ostentan cargos públicos de relevancia que no hacen más que derrochar dinero y gestionar inadecuadamente ciertas instituciones públicas para después tener el pretexto de privatizar y así garantizar su futuro una vez terminada su andadura política, toca un poco la moral, sobretodo a aquellos que se pelan el culo todos los días para tener algo que comer durante el mes.

El dentista

Cuando creía que todo había terminado mi hermana pequeña me miro y me dijo «Pues va a ser que tienes retracción de las encías«. Así que acabamos en el dentista.

Cuando me llamaron me hicieron sentarme en el sillón de las reparaciones bucales y antes de que pudiera decir nada ya me habían metido dos manos en la boca, diagnosticado 3 caries y encargado una radiografía. En cuanto pude mencionarle lo de las encías, me miró y me dijo que no era alarmante, que utilizara un cepillo más suave, que cepillara de arriba a abajo y que no lo hiciese con mucha fuerza. Después de todo, según me contó, se podía hacer un implante de mi propio paladar para cubrir la zona al descubierto pero que sería mejor ver cómo progresaba.

Al cabo de unos minutos me presentaron el presupuesto que ascendía a unos cuantos cientos de euros y que me hizo pensar en lo caro que era el metro cuadrado en mi boca.

La primera intervención fue para empastarme una muela que estaba bastante afectada por dentro aunque no sentía molestias. La dentista me tuvo que pinchar 3 ó 4 veces porque se me dormía parte de la lengua pero no había signos de lo que lo hiciera el labio, que parecía ser el importante. Me hizo el empaste pero me dijo que habría que desvitalizar la muela y que lo veríamos con el doctor la próxima vez. Así que me fui a casa con media cara dormida y balbuceando. Tuvieron que pasar 3 horas hasta que recobré la sensibilidad de la cara, no sin antes dejarme con dolor a la hora de abrir la mandíbula, para variar.

Corre corre

Se lanza con un grito al estilo banzai que no es más que un mero reflejo del «No sé cómo se para esto de correr» y Champi realiza el recorrido desde el sofá hasta el televisor ante la mirada preocupada de su madre que no hace más que pensar «Qué hostia se va a dar».

Pasó de caminar ayudándose de las paredes a despreciar las manos que le intentaban ayudar a caminar, pues él solito ya se valía para patearse la casa. Y así es, ahora va a su rollo y, cuando su madre se pone a hablar despreocupadamente por teléfono con la abuela, él camina hasta su espalda, le coge de la pinza del pelo y tira de ella.

El router maldito

Si existe algún modelo de router que me haya tocado las narices de forma profesional, ese ha sido, sin lugar a dudas, el Thomson TG585i V7. Justamente es el que te coloca Telefónica habitualmente para las conexiones de ADSL.



El motivo por el cual toca las narices a dos manos no es otra que la de ser muy poco configurable y tener una interfaz hecha por algún ente maligno deseoso de hacer perder los nervios a cualquier sysadmin.

En esta ocasión me tocaba utilizar el router como un simple punto de acceso Wifi, es decir, como si fuese un simple switch al que le llega Internet a través de otro router y así aprovechar su antenita.

Pues lo que en otros routers es algo como seleccionar una opción desde el interfaz web para ponerlo en modalidad bridge, en este me hizo falta instalar un servidor TFTP y un Bootp para flashearlo con el firmware original y no el de Telefónica.

Con esta pequeña acción se me permitía cambiar la IP propia del router, cambiar la configuración de su servidor DHCP y usarlo como bridge.

Al principio pensé que todas esas opciones estaban ocultas a mi vista y que todos los errores que me daba al intentar definir una nueva IP eran culpa mía, pero no, era el maldito router de Telefónica.

Las instrucciones más específicas para hacer lo mencionado arriba vienen de la mano de chriss745.

Año 2011

Aquí es cuando felicito a todo el mundo por la llegada de un mejor y próspero año nuevo y esas cosas, pero no nos engañemos, el 2011 no pinta bien, nada bien. Pero no hay que ser pesimista y ponerse en lo peor porque, como diría Igor: podría ser peor, podría llover.