Se quieren deshacer de mi

Si ya tuve un incidente cuando iba a a trabajar, en el que mi vida corrió peligro, en esta ocasión fue a la vuelta del trabajo.

Caminaba rápidamente cuesta arriba pasadas las 14h, con cierto hambre y ganas de descansar. Llegué a una esquina y fui a cruzarla por el paso de peatones, pero primero comprobé que ningún coche pudiese pasar en ese momento. Me equivoqué. Un coche rojo granate, a una velocidad normal para ir en línea recta, decidió girar por esa misma esquina por la que yo había bajado, dando un volantazo y mirando hacia el lado opuesto al que yo estaba (sí, otra vez). Así que, cuando yo ya me veía encima de capó rompiendo con mi cabeza el parabrisas, el conductor se percató de mi presencia y freno en seco dejándome a menos de un palmo de distancia de un buen atropello. El hombre se asustó y yo me mosqueé.

No me hace mucha ilusión que me rompan unos cuantos huesos y, menos todavía, terminar muerto porque tengo cosas que hacer y que decir 😛 . Así que, si el que trama estas cosas está leyendo esto (que paranoico que soy xD ) que se esfuerce un poco.

La conclusión que podemos sacar por ahora es lo perjudicial que es el trabajo.