Darknekros

Mumble

Mumble es, básicamente, una aplicación para hablar por Internet, muy utilizado en juegos online y que se caracteriza por una calidad de sonido alta en bajas latencias. Es una aplicación, que a diferencia de TeamSpeak, es libre y gratuita para Gnu/Linux, Windows y Mac OS X. También parece haber un proyecto abierto para Android, pero hay que llevar cuidado porque las cláusulas de las operadoras de telefonía móvil pueden prohibir el uso de tales aplicaciones en sus redes.

Lo bueno del programa es que detecta cuándo estás hablando con lo que no tienes que darle a ningún botón (aunque exista la posibilidad), tiene cancelación de ruido y una tecnología llamada sonido-posicional perfecta para los juegos entre otras cosas.

El percusor de que acabase montando un servidor de Mumble para nuestro propio uso fue Darknekros. Con él estuve probándolo y funciona de maravilla, al menos en Linux. La instalación del cliente es básica en este sistema porque está en los repositorios de Ubuntu y en el one-click de OpenSuse (recomiendo el repositorio de Dahool.

La instalación del servidor es algo más compleja, al menos en OpenSuse 11.1:

  • Abrir el puerto 64738 (TCP y UDP) en el router y el cortafuegos.
  • Instalar Mumble Server (Murmur) desde el repositorio de Dahool.
  • Editar el fichero de configuración /etc/mumble-server.ini donde lo más importante es indicar el valor database=/var/lib/mumble-server/murmur.sqlite
  • Asignar la contraseña del administrador con el comando murmurd -ini /etc/mumble-server.ini -supw contraseña
  • Y, si hiciese falta, reiniciar el servicio /etc/init.d/mumble-server restart.
  • Ahora sólo me falta ponerlo a prueba con más gente a ver qué tal rinde.

    El simbionte de papel higiénico

    En los aseos de la biblioteca de la universidad iba yo a lavarme las manos cuando me percaté que había ya alguien haciendo lo mismo. Me puse al lado y le dije:

    – Llevas papel higiénico pegado en la suela del zapato.

    El chico bajó la vista para comprobar que, efectivamente, era portador de una estela blanca bajo su calzado y me contestó:

    – Vaya, gracias por avisarme, no es plan de salir por ahí con esto pegado.
    – Sip, no es plan – le dije medio sonriendo discretamente.

    El chico salió antes que yo y, al cabo de unos segundos, salí yo. Dirigiéndome a las escaleras para subir a la segunda planta me encontré a Darknekros, nos paramos y empezamos a hablar, pero justo al inicio de la conversación, vi al chico de antes subiendo las escaleras. Llevaba el papel higiénico pegado en el zapato ¡pero en el zapato opuesto al que lo llevaba antes!

    Moraleja: si vas a quitarte algo pegado en la suela de un zapato con la ayuda de tu otro zapato, al finalizar comprueba que ambos estén bien.